Josef von Sternberg
Nueva colaboración entre Sternberg y Dietrich, en la cumbre de sus respectivas carreras, en plena forma. Esta recreación de la juventud, llegada a la corte e intrigas de la Catalina II de Rusia le sirve al director a plasmar un nuevo y misterioso ejercicio de estilo, al plantar la corte del imperio de monstruosas estatuas, y a la diva alemana variar de registros desde la bella ingenua a la amante voraz de los soldados con uniforme. Muy gozosa.
3 comentarios:
Ejercicio de estilo con mayúsculas, casi cine experimental, aunque tenga historia. Pura, gozosa, áurea y gloriosa forma, jaja...
Es absolutamente genial.
Tomo nota.
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